Hemos querido dedicar unas lineas de agradecimiento a Dios primeramente que a respaldado de gran manera este ministerio y Hermanos que han colaborado con este proyecto.

Los Amigos de mercabar en la zona industrial III que viernes tras viernes nos esperan con los brazos abiertos para proveernos de las verduras.

Tambien los hermanos de panaderias como los artistas del pan , un saludo a nuestro amigo Leo Suares en la carrera 18 entre 24 y 25 y en la calle 25 entre las carreras 21 y 22.

Nuestros amigos de bless dirijido por la hermana Gloriana y su esposo con la linea de productos de limpieza al mayor.

A mi amigo Luis Rivero Vendedor Independiente ; de repuestos de vehiculos de todas las marcas , celulares , cauchos de todas las medidas y mucho mas.

A nuestros Hermanos de Concilio Boston en COLOMBIA y en VENEZUELA Pastor Adalberto y su familia.

A mi esposa especialmente Maria Eugenia por su apoyo incondicional te amo.

A mi madre espiritual Lina y su esposo cheveto .

Mi Pastor pelayo y familia

Mi pastor Idilio Da Silva y su familia y toda esa gente linda que nos opoya en oracion que me perdonen que no las mensiono por que la lista seria interminable

QUE DIOS LES BENDIGA GRANDEMENTE A TODOS Y LES HAGA MULTIPLICARSE EN GRAN MANERA

Jesucristo sana heridas y levanta al caido

El confiar en Dios no es solo saber que el te ayudara, es dencansar en sus brazos sabiendo que el obrara en tu vida, Dios te bendiga.

Nuestras Puertas se Abren para Ti...

Porque tuve hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y me disteis de beber; fui forastero, y me recogisteis; estuve desnudo, y me cubristeis; enfermo, y me visitasteis; en la cárcel, y vinisteis a mí.
Entonces los justos le responderán diciendo: Señor, ¿cuándo te vimos hambriento, y te sustentamos, o sediento, y te dimos de beber?
¿Y cuándo te vimos forastero, y te recogimos, o desnudo, y te cubrimos?
¿O cuándo te vimos enfermo, o en la cárcel, y vinimos a ti?
Y respondiendo el Rey, les dirá: De cierto os digo que en cuanto lo hicisteis a uno de estos mis hermanos más pequeños, a mí lo hicisteis. Mt. 25:35-40